El director de la juventud del Gobierno de la provincia estuvo en la sede municipal y dialogó con el coordinador Mauro Lamas
La relación entre el gobernador Gustavo Sáenz y el intendente de Rosario de la Frontera, Gustavo Solis, no quedó en los mejores términos por la fuerte disputa electoral que hubo en ese distrito municipal.
Pero con el correr de los meses y la aparición de la pandemia, tal parece que ambos dirigentes empezaron a transitar por un camino de diálogo, o al menos de trabajo en equipo.
Este martes se pudo ver al director provincial de la juventud, Pablo Marcial, reunido con Mauro Lamas, coordinador de la políticas juveniles rosarinas. El encuentro fue en las instalaciones de la oficina de la juventud local, y tras la reunión ambos posaron para las fotos que fue destacada por la prensa oficial rosarina en su página de Facebook.
Marcial es oriundo de la ciudad termal y políticamente se ha mostrado muy distante de la actual gestión municipal. Sin embargo tras el encuentro en las redes sociales agradeció a la Oficina de la Juventud de Rosario «por la atención y la buena predisposición», aunque evitó mencionar al Jefe Comunal.
«Salimos a escuchar y a charlar con los jóvenes del interior de la provincia para que sigamos juntos aportando ideas y propuestas en esta etapa de cuarentena», agregó.
La llegada de Marcial se dio luego de que Solis destacara como muy productiva la teleconferencia que mantuvo con Sáenz el lunes que pasó. Previo a esta charla virtual en La Candelaria, el intendente habló con Pablo Outes, hombre de confianza del gobernador.
Con relación a la visita del funcionario de Sáenz, la Municipalidad dijo que «el funcionario provincial trasmitió su compromiso de gestionar diferentes recursos para nuestros jóvenes estudiantiles y jóvenes adultos de Rosario de la Frontera».
Y en el informe que fue publicado ayer además agrega; «se llevó una buena imagen de como viene trabajando ésta gestión con ideas innovadoras en estos tiempos de pandemia«.

