Viaje a Dubái con fondos del Estado: indignación por el paseo de Emilia Orozco

La diputada salteña viajó a Medio Oriente en una misión oficial sobre discapacidad, pero las fotos desde Dubái y el silencio sobre los resultados del viaje desataron críticas en todo el país. Mientras el Gobierno recorta programas, sus funcionarias se sacan selfies en el lujo.

Política19/06/2025Por Expresión del SurPor Expresión del Sur
Emilia Orozco en Dubai

Mientras miles de familias argentinas reclaman atención médica, pago a prestadores y cumplimiento de derechos básicos para personas con discapacidad, una comitiva oficial encabezada por funcionarias libertarias generó un escándalo nacional: la diputada salteña Emilia Orozco fue vista de paseo por Dubái, en un viaje financiado por el Estado.

La legisladora nacional de La Libertad Avanza formó parte de una delegación junto a Romina Núñez, titular de la Agencia Nacional de Discapacidad, y la legisladora porteña Lucía Montenegro, cuya agenda oficial era participar de un encuentro internacional sobre accesibilidad en Israel. Sin embargo, lo que trascendió fueron imágenes turísticas en Dubái, sin detalles sobre la supuesta misión institucional.

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Las postales desde el Burj Khalifa, el rascacielos más alto del mundo, y del lujoso Dubai Mall circularon por redes sociales y medios del país. La falta de información sobre las actividades reales en Israel —y el contexto de crisis del sistema nacional de atención a la discapacidad— desataron el enojo de familias, organizaciones y profesionales.

Desde la Fundación Hablemos de Autismo emitieron un duro comunicado: “Mientras las personas con discapacidad siguen esperando vivienda, acompañamiento terapéutico y atención médica, ellos pasean por Dubái sacándose selfies”, expresaron.

Según trascendió en medios nacionales como La Política Online, no está claro si la delegación llegó efectivamente a Israel o si, por la tensión regional vinculada al conflicto con Irán, permanecieron en Emiratos Árabes Unidos. Pero para miles de familias, la polémica no está en el destino final, sino en el uso de fondos públicos para un viaje sin resultados claros y en medio de recortes sistemáticos.

La controversia aumentó cuando se supo que Montenegro, aún desde Medio Oriente, presentó un proyecto en la Legislatura porteña para declarar de interés una carta de un soldado de Malvinas. Para muchas agrupaciones fue una maniobra para justificar una misión oficial que no rindió cuentas ni mostró impacto concreto.

El malestar también crece en paralelo a una convocatoria nacional para este miércoles frente al Senado, donde se exigirá el tratamiento urgente de la Ley de Emergencia en Discapacidad. La imagen de funcionarias paseando por Dubái mientras en el país se suspenden tratamientos y se retrasan pagos fue interpretada como un símbolo del desinterés oficial.

“No hay plata, repiten desde el Gobierno. Pero parece que para algunos viajes, sí”, ironizó una dirigente del sector. Para muchas familias, el paseo en Dubái con fondos públicos marca una línea: la distancia entre el discurso de ajuste y la realidad de quienes pagan los costos.

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