La ciudad termal revivió una Pasión de Cristo, que conmovió hasta las lágrimas

Rosario de la Frontera se sumergió en la profundidad de la tradición cristiana al conmemorar el Viernes Santo con una increíble y multitudinaria representación del Viacrucis, con una pasión, muerte y resurrección de Cristo, tan real que hizo sumergir al público, en la Jerusalem del año 33 d.C.

Fue una puesta en escena basada en las antiguas costumbres populares europeas, en espacios públicos en los que actores, en ámbitos escénicos armados en plaza Independencia y calles, mostraron las distintas circunstancias del calvario de Jesús. Pero la presentación de esta obra en Rosario no es casual. Su impronta, su mística y su vestuario, trajo a la memoria a aquella Pasión de Cristo que a comienzos del año 2000, dirigió el reconocido artista salteño, Luis Caram, actual director de Cultura del intendente Kuldeep Singh.

El trabajo estuvo a cargo del Grupo Creativo dirigido por el profesor Fernando Portal, quien personificó magistralmente a Jesús. Junto a él, se destacaron otros talentos locales y figuras invitadas, entre ellas, el propio director de Cultura, Luis Caram, la directora de la academia Shansa, profesora Valeria Placencia, y la reconocida artista Sandra Kuleza, entre otros.

Los rosarinos  un momento de reflexión, recogimiento y renovación espiritual para millones alrededor del mundo. 

La representación del Viacrucis fue una impresionante puesta en escena, destacada por su excelente escenografía y efectos especiales sorprendentemente logrados. La iluminación y el sonido, a cargo de Sonido Power, transportaron a los espectadores a los pasajes más dramáticos de la Pasión de Cristo, sumergiéndolos en la atmósfera de la antigua Jerusalén.

Las escenas fueron tan reales, que conmovió hasta las lágrimas a los asistentes. Cada gesto, cada palabra, transportó a la audiencia al corazón mismo de la Jerusalem del año 33 d.C.

Así. Visto el destacado trabajo de los rosarinos, no es difícil imaginar la proyección de esta obra, como otro de los grandes atractivos para el turismo de Semana Santa en Salta.  

En medio de la solemnidad y el respeto, la comunidad de Rosario de la Frontera renovó su compromiso con los valores espirituales que sostienen su identidad. El Viacrucis no solo fue un evento cultural, sino una expresión profunda de la fe que une a su pueblo en tiempos de alegría y tribulación.

Asimismo, fue una oportunidad para recordar el amor incondicional de Cristo por la humanidad, su sacrificio y su mensaje de esperanza y redención. 

Las imágenes captadas por Rolando Flores, reflejan la intensidad y la emotividad de este momento único en la vida de la comunidad, una experiencia que trasciende las palabras y se graba en el corazón de quienes tuvieron el privilegio de presenciarla.