Sus perros le salvaron la vida: niño de 9 años sobrevive a la selva y al huracán Miltón

Uno de sus perros volvió a la civilización y ayudó a seguir las huellas del pequeño, mientras el otro can no se despegó del niño.

Un niño mexicano sobrevivió de milagro durante ocho días en medio de la espesura de la selva en el estado sureño de Campeche, resguardado de la furia del huracán Milton que afectó la región sureste del país, bajo el acecho de animales salvajes y a expensas de animales venenosos.

El infante, de nueve años, fue afanosamente buscado por dos centenares de personas, entre familiares y brigadas de ayuda del gobierno y voluntarios, desde su desaparición el pasado día 5 hasta que logró ser hallado ocho días más tarde, junto a sus dos perros hasta que fue hallado con síntomas de deshidratación y desnutrición el pasado viernes.

La última vez que fue visto antes de desaparecer se hallaba jugando con sus dos perros en un galpón del rancho donde vivía, ubicado en la localidad de Río Blanco II, en la localidad de Palizada, pero luego su familia temió por su vida y reportó ante la Comisión Local de Búsqueda (CLB) su desaparición, por lo que la Fiscalía activó de inmediato la Alerta Amber.

Para ubicarlo fue necesario el uso de drones, pero la selva era tan densa que era difícil observarlo desde el aire, por lo cual también se empleó a perros olfateadores del Ejército y de rescatistas entrenados en operaciones de búsqueda y a especialistas en rescate de personas que se guiaron por las huellas que dejó en los senderos y vericuetos de la floresta.

Sus perros le salvaron la vida

Joel del Carmen, conocido por sus familiares y amigos como "El Choco", que ahora es el héroe del momento, nunca dejó a sus perros, pero al cuarto día uno de ellos logró retornar al poblado donde vivía y con ello ayudó a seguir su rastro y hallarlo sano y salvo.

Esta mascota fue fundamental pues muchas de las huellas que había dejado el niño con sus perros se habían borrado por las intensas lluvias que dejó Milton, dijo el titular de la CLB, Jesús Quintero.

El niño pudo alimentarse con algunos frutos que podía recolectar pero estaba severamente desnutrido, siempre a merced de ser mordido por serpientes, arañas o atacado por cocodrilos.

Cuando fue hallado a 12 kilómetros de su vivienda se encontraba solo con su perro, sentado junto a un arbusto, descalzo, apenas vestido con una remera y un pantalón corto, por lo que fue llevado de inmediato a una unidad médica para recuperarse.

Los médicos determinaron que su estado de salud era estable, que no había sufrido golpes ni lesiones, pero que requería ser cuidado para recuperar su peso por su extrema delgadez y descansar para superar el agotamiento severo que sufría y la deshidratación.

"El Choco", según su propio testimonio, pasó varias noches sin abrigo y alimento adecuado, y su desaparición generó gran inquietud. Al finalizar el vía crucis del pequeño Joel, sus vecinos de la comunidad de Palizada salieron de sus viviendas a celebrar con expresiones de júbilo la buena noticia de su reaparición y agradecieron a los "espíritus del monte" y a los "aluxes" (duendes de la mitología maya) por haberlo devuelto a salvo.

Otros acudieron a iglesias y templos para agradecer a Dios por su regreso y por haber concluido este episodio con un final feliz.

Joel tuvo una discusión con sus padres, quienes lo amenazaron con quitarle a sus dos perritos, por lo que temeroso de perderlos decidió huir de su hogar.

Agencia ANSA.