Desde el potrero al Xeneize: Toto Meneses se afianza en las inferiores de Boca

Con apenas 12 años, Mariano Meneses, más conocido como "Toto" o “Salta” en el ámbito futbolístico, se posiciona como una de las jóvenes promesas del fútbol argentino. Formado en los potreros de El Quebrachal, Salta, el jugador actualmente integra la categoría 2012 de las divisiones inferiores del Club Atlético Boca Juniors, institución en la que continúa desarrollando su carrera con un notable rendimiento en distintos puestos del campo de juego.

Meneses inició su recorrido deportivo a los cuatro años en la escuelita local de su pueblo natal, y desde entonces ha transitado un camino ascendente en el fútbol infantil y juvenil de la región. Su participación en diversos clubes salteños le permitió destacarse por su técnica individual, su lectura de juego y su capacidad para desempeñarse en múltiples funciones dentro del equipo.

Uno de los momentos más destacados de su carrera fue su convocatoria al seleccionado argentino para disputar la Copa AIFY en Uruguay. Este torneo internacional le brindó la oportunidad de exhibir su potencial ante entrenadores y scouts de clubes nacionales e internacionales.

En Boca Juniors, "Toto" se destaca como volante ofensivo (posición número 10), aunque también ha sido utilizado como extremo izquierdo (11) y ocasionalmente como lateral por el mismo sector (3), lo que evidencia su versatilidad táctica y su disciplina en la formación futbolística. La polifuncionalidad en el esquema y su correcta interpretación de los sistemas de juego le han permitido consolidarse dentro del equipo.

En su comunidad, Meneses ha sido distinguido con el “Premio Quebracho”, un reconocimiento que se entrega a referentes destacados en el deporte local, hecho que refleja el arraigo y orgullo que su figura genera en El Quebrachal.

Con el respaldo de su familia y bajo la estructura formativa de uno de los clubes más importantes del continente, la proyección de Meneses se mantiene en constante crecimiento. Su caso es representativo de los talentos del interior del país que, mediante esfuerzo, disciplina y acompañamiento institucional, logran insertarse en el fútbol profesional desde temprana edad.

La historia de “Toto” simboliza el vínculo entre el deporte amateur del interior profundo y las grandes estructuras del fútbol argentino, destacando el valor de la formación desde las bases y el rol fundamental que cumplen los clubes en el desarrollo integral de los jóvenes deportistas.