Metán: estudiantes promueven la lectura en el hospital y el hogar de ancianos

Alumnos del Instituto Superior Juan Carlos Dávalos visitaron el hospital y el hogar de ancianos de Metán para promover la lectura entre pacientes y abuelos.

Sociedad23/10/2024Xiomara DíazXiomara Díaz
Hospital

La lectura es un puente hacia nuevos mundos, un medio de escape y una fuente inagotable de conocimiento. Desde tiempos inmemoriales, los libros acompañaron a la humanidad, ofreciendo consuelo, entretenimiento y una oportunidad para la reflexión. En la vida diaria, la lectura enriquece nuestras experiencias y alimenta nuestra imaginación. Sin embargo, su importancia trasciende lo cotidiano, convirtiéndose en un apoyo vital para quienes enfrentan situaciones difíciles.

En este contexto, los alumnos del Profesorado de Lengua y Literatura del Instituto Superior Nº6021 "Juan Carlos Dávalos", bajo la dirección de la profesora Lic. Paola Márquez, pusieron en marcha un proyecto denominado "La lectura como una posibilidad de transformación individual y social", que busca fomentar el hábito de la lectura en la comunidad. Recientemente, se llevó a cabo la tercera actividad del proyecto, que incluyó visitas al Hospital Del Carmen y al Hogar de Ancianos.

Hogar de ancianos

Durante estas visitas, los estudiantes donaron material de lectura y otros elementos, como lápices de colores, para fortalecer la conexión entre los pacientes y la literatura. “En ambas instituciones, la idea era promocionar la lectura, visitándolos y ofreciendo lecturas de cuentos e historias”, expresó la profesora Márquez. En el hospital, los alumnos interactuaron con los pacientes en las salas de niños, mujeres y hombres, compartiendo relatos que proporcionaron una distracción en momentos difíciles. La docente agradeció a las autoridades del hospital por permitir esta iniciativa, que consideraron beneficiosa para los internados.

En el Hogar de Ancianos, los estudiantes brindaron compañía a los residentes a través de historias y relatos. “Acompañamos a los abuelitos durante la hora de la merienda, llevándoles cuentos y actividades como sopas de letras y mándalas para mantenerlos entretenidos”, añadió Márquez.

Este proyecto no solo beneficia a los receptores de las lecturas, sino que también tiene un impacto en los estudiantes. “En cada actividad, los alumnos realizan un proceso de autoevaluación. Se ha notado un efecto motivador en ellos. Aunque no se puede esperar un cambio total y absoluto, es una forma de iniciar el acercamiento a los libros”, concluyó la profesora.

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