Issa pidió una gestión cultural con identidad, participación y apertura a la comunidad

La designación de Adriana Cazón al frente de la Dirección de Cultura fue el marco elegido por el intendente José María Issa para reafirmar el rumbo que su gestión busca imprimir al área: una política cultural participativa, cercana a la gente y con fuerte arraigo en la identidad metanense.

En el acto celebrado por el Día de la Tradición, Issa destacó que “la cultura es el corazón de una comunidad”, y pidió a la nueva funcionaria “mantener viva la esencia de Metán, pero también abrir espacios para todos los sectores que construyen nuestra identidad día a día”.

El jefe comunal sostuvo que la gestión cultural debe “promover el encuentro, la creatividad y el orgullo por lo propio”. En ese sentido, remarcó que la cultura “no se limita a los escenarios o los festivales, sino que también se expresa en los barrios, en las escuelas, en las familias y en cada tradición que se transmite de generación en generación”.

El abrazo de la tradición: la emoción del primer peregrino de San José de Metán

Issa señaló además que la designación de Cazón representa “un reconocimiento al talento y al compromiso de quienes vienen trabajando desde hace años dentro del municipio y en la vida cultural de Metán”.

“Queremos una gestión con sentido de pertenencia, que integre a nuestros artistas, músicos, bailarines, artesanos y hacedores culturales. Que la cultura siga siendo ese espacio donde Metán se reconoce y se proyecta hacia el futuro”, enfatizó el intendente.

Metán valora el talento interno: Cazón y el ascenso municipal basado en la capacidad

Por su parte, la flamante directora de Cultura agradeció la confianza y afirmó que su gestión buscará “seguir fortaleciendo la participación, generar redes con las instituciones locales y promover el trabajo conjunto con las comunidades rurales y urbanas”.

El mensaje del intendente Issa, en el marco del Día de la Tradición, dejó claro el eje de su gobierno en materia cultural: una gestión que combina la preservación de las raíces con una visión abierta e inclusiva del desarrollo cultural, entendiendo que el patrimonio más valioso de Metán es su gente y sus expresiones vivas.